La diáspora humana busca su unidad cultural gracias al desarrollo de la televisión por satélite, de internet y de la radio; las imágenes, los escritos y los sonidos viajan a una velocidad casi instantánea , y en todo el mundo, las personas tienen acceso a los mismos productos culturales preconizando un lugar en la tierra a veces sin valorar su coste.
La naturaleza ha dejado de ser el espacio que cobija al hombre para convertirse en fuente de trabajo y transformación tendente a la productividad incondicionada. En este mundo global vivimos con la esperanza que los desarrollos científico tecnológicos podrán revertir el proceso de deterioro del medioambiente, lo cual ocurrirá cuando el hombre cambie su mirada respecto a su propio ser y al de la naturaleza.
imagen: Estambul Galatasaray
Menudo panorama, que buenas expectativas se podrían formular... ya ni siquiera lo que nos queda es nuestro, que desastre!
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