Campohermoso en Almeria no hace honor a su nombre. En esta población vecina al parque natural Cabo Gata-Nijar la tierra ha perdido su pelaje hirsuto a cambio de una marejada de plástico insalubre en el que convive un complejo mestizaje laboral entre pesticidas y fertilizantes.
Este paraje reino del sol, de los lagartos y de las piedras muestra un debilitado patrimonio etnológico quebrado por la acción del hombre y su concepto de desarrollo insostenible. Con este panorama, sobre las escasas sombras del páramo pisaremos en breve las últimas hojas secas de la nostalgia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
por favor deja tu comentario, se agradece