Como si de una bendición se tratara, la calidez de los últimos rayos solares abrazan con entusiasmo la vespertina mirada de un cardo en el fin de su existencia; A veces tengo la extraña sensación que la propia naturaleza en agradecimiento por los servicios prestados, impone un ritual nostálgico de despedida a cada ser vivo que muere. ¿Cuál será el nuestro?...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
por favor deja tu comentario, se agradece